Saturday, November 05, 2005

Alexandre Jollien


El oficio de ser hombre. Es el título de su último libro. De la mano de Sócrates, previamente había escrito “Elogio de la debilidad”. No sigan leyendo el artículo, y busquen ambos libros.
Si se atrevido a seguir gastando su tiempo en esta colaboración: bienvenido. Él se explica mucho mejor, pero. Les pongo en antecedentes. Alexandre Jollien (1975) es un joven filósofo suizo, que en sus primeros segundos de vida se encontró con su propio cordón umbilical alrededor de su cuello. El regalo inicial que tuvo fue el de una falta de oxígeno a su cerebro. Atetosis, es el nombre de la enfermedad que padece en la actualidad, que hace que sus movimientos y voz parezcan sus peores enemigos.
Diecisiete años estuvo en una institución especializada. Sí, junto a unos compañeros que también situaban su horizonte temporal en el día a día. La sociedad les denomina diferentes, en el mejor de los casos, y discapacitados si se utilizan términos políticamente correctos.
Jollien podría odiar la vida más que cualquier otro. Pero no, intenta proponerla como ocasión de paz, de serenidad y de alegría.
Siguiendo a su maestro Platón, afirma la inanidad del siguiente dualismo: no existe el cuerpo (detestable) por un lado y el alma (venerable) por el otro. Reconociendo su cuerpo, parece que su pensamiento fluye como una confesión de su carne. Se convierte en su mejor altavoz.
Interesantes reflexiones hace sobre el semejante, el prójimo, en su último libro. Nos cuenta que el semejante que quiere distinto al discapacitado, al diferente, puede ayudar a construir a la persona en la misma medida en que la puede destruir. Pero necesitamos todos al semejante. Gran realidad, que nos permite vivir en sociedad. O no. Ciertamente.
Una vida difícil, como la de tantos que nos rodean, no es algo a lo que se deba aspirar. Cuando uno se encuentra con la adversidad, sí que puede recibir de sus enseñanzas y abrir una puerta a la magnífica condición humana. Fundamentalmente, a su dignidad.
“Ofrecer alegría donde se imponen, por ventura, la compasión y la tristeza”, resumen del oficio de ser hombre.

1 comment:

luis. alergico a las mayusculas y a los acentos. said...

hola soy diseñador gráfico y te sugiero que quites el fondo oscurp y escribas en negro sobre fondo blano, no se ha inventado nada mejr,
con ese fondo oscuro y las letras blancas wes mucho mas dificil leer...
pruebalo

gracias
luis